La adolescencia está marcada por cambios como aumento de talla y peso, aumento de masa corporal y de masa ósea, por lo que requiere mayor cantidad de energía y nutrientes como carbohidratos, proteínas, grasas, vitaminas y minerales, todo en forma balanceada.
Las necesidades son muy distintas para cada adolescente y dependen de sus características personales y estilo de vida, por lo que no se puede generalizar una dieta para todos.
Aquí te damos algunos consejos para garantizar una alimentación más saludable:
- Tú alimentación debe ser variada: nuestro organismo necesita diferentes nutrientes para estar sano, ningún alimento los contiene todos, de modo que no es conveniente comer siempre lo mismo.
- Consume frutas y verduras: te ayudan a mantenerte sano y son el complemento ideal para el desayuno, refrigerio, almuerzo y comida.
- Disminuye el consumo de harinas y pan, enlatados, carnes frías, fritos y gaseosas. Fomenta el consumo de cereales integrales como avena y cebada.
- Establece horarios y recuerda que debes comer por lo menos cinco veces al día (desayuno, media mañana, almuerzo, algo y cena). Evita dietas y ayunos prolongados.
- Bebe suficiente agua: es fundamental mantener el cuerpo bien hidratado, acostúmbrate a tomar por lo menos 5 vasos al día.
- Ojo con la higiene: no toques alimentos sin lavarte las manos con agua y jabón y no olvides cepillar tus dientes después de cada comida.